Un impresionante trabajo interpretativo para contar vidas a precio de saldo
Dos hermanos se reencuentran en el desván de la casa familiar después de 16 años sin hablarse. Dentro de poco, la casa debe ser demolida y Víctor, un humilde policía a punto de retirarse, y su esposa Esther convocan el hermano mayor, Walter, cirujano de éxito, a un encuentro con el tasador para decidir el precio de los viejos muebles familiares. Todo va bien, hasta que los recuerdos hacen despertar los fantasmas cerrados en este viejo ático. Arthur Miller, el autor más destacado del teatro norteamericano,  tiene una obsesión que convierte en don, de forma magistral: radiografiar lo más íntimo del ser humano.

En sus obras nos vemos reflejados, intentando digerir lo que vemos. La fuerza de este montaje se asienta en un impresionante trabajo interpretativo de actores como Tristán Ulloa (el comisario de “Fariña”) o Gonzalo de Castro (Doctor Mateo, Superlópez…). “La grandeza de estos actores es que vuelven real y perturbador todo lo que tocan. Lo hacen con tanta naturalidad que arrojan al patio de butacas un sombrío trozo de vida con el que el espectador empatiza y se identifica”, ha dicho el crítico de ABC. Miller y Silvia Munt nos ponen delante un complejo debate moral para la sociedad de hoy: el triunfo como una forma de fracaso, la familia como una condena

Obra incluida en el abono de otoño del Teatro Bergidum de Ponferrada.